Valencia. Riesgo de desplome de una medianera en un solar municipal en El Cabanyal.

Los bomberos han intervenido este miércoles ante el riesgo de desplome de una medianera en un solar municipal del barrio valenciano de El Cabanyal, según ha informado la Asociación de Vecinos de Cabanyal-Canyamelar en un comunicado.

 

La entidad ha señalado que la ausencia de vallado en un solar del Cabanyal, ubicado en la calle José Benlliure número 167, de propiedad municipal, «ha propiciado la desaparición, seguramente por robo, del apuntalamiento que se había tenido que instalar tras el derribo del edificio de municipal para sujetar la medianera del edificio colindante de propiedad privada».

 

Como consecuencia, ha agregado, los bomberos han tenido que acudir esta tarde «ante el riesgo de desplome de la medianera», en una zona «constantemente transitada por niños que habitualmente corretean descontrolados por la calle».

CABANYAL

En su momento, ha recordado, el Ayuntamiento de Valencia «decidió incumplir sus propias ordenanzas municipales y dejar sin vallar muchos de los solares que han venido ocasionando sus derribos». «Una ordenanza –ha agregado– que es de aplicación para cualquier solar de la ciudad, pero cuyo incumplimiento resulta especialmente gravoso en las zonas declaradas Conjunto Histórico, ya que en estos casos no se pueden conceder licencias de derribo si no se acompañan de la consiguiente licencia de construcción».

 

Los solares municipales, casi todos ellos de propiedad municipal, que existen en la zona afectada por la prolongación «son una continua fuente de conflictos», ha lamentado la asociación. «En unos casos si están vallados se convierten en estercoleros, y en otros casos en los que no están vallados han acogido hogueras que han propiciado incendios en los edificios colindantes», ha criticado.

 

A su entender, «la política municipal en El Cabanyal se ha convertido en un inmenso problema de gestión que el Ayuntamiento no sabe o no quiere resolver». «Las consecuencias de esta deplorable gestión las sufrimos los vecinos y en algunos casos, como este, incluso las tienen que soportar económicamente por el perjuicio sobre sus propiedades»

 

Levante-emv

 

Andalucía. Los destrozos en el patrimonio al aire libre crecen por la falta de vigilancia.

Los graves destrozos aparecidos la última semana en las pinturas rupestres de la Cueva de los Escolares, en Santa Elena (Jaén), junto al conjunto de arte esquemático y levantino declarado en 1998 por la Unesco Patrimonio Mundial, ha reabierto el debate sobre la fragilidad y desprotección que sufre este legado con miles de años de antigüedad. Andalucía, con más de 3.000 yacimientos arqueológicos catalogados, es uno de los lugares donde más proliferan los actos vandálicos, muchas veces alentados por un mercado negro que mueve millones de euros. La dispersión y difícil localización de este patrimonio, unido a la falta vigilancia, es el caldo de cultivo de las infracciones, que se han disparado en los últimos años.

 

La situación más precaria se da en los conjuntos patrimoniales que están al aire libre, como es el caso de las pinturas rupestres. El conjunto artístico reconocido por la Unesco data aproximadamente entre el 8.000 y 3.500 antes de Cristo y está formado por más de 700 sitios, de los que cerca de 50 se hallan en la provincia jiennense. A ellos hay que añadir más de 300 abrigos en la fachada atlántica de Cádiz. “La desprotección que sufre este patrimonio es un problema muy grave, Andalucía es una zona única en el mundo en arte rupestre”, apunta José Luis Sanchidrián, catedrático de Prehistoria.

 

Los expertos no se ponen de acuerdo a la hora de plantear las soluciones para evitar los expolios. “En estos casos solo cabe el cerramiento de los yacimientos, pero a mí no me gusta porque indicamos al expoliador dónde está el bien. O hacer una alianza entre Cultura y Medio Ambiente para que la guardería medioambiental también se implique en la vigilancia de estos bienes”, señala Bartolomé Ruiz, director del conjunto de los Dólmenes de Antequera. Este yacimiento, que también aspira a su declaración como Patrimonio Mundial, es citado por los expertos como ejemplo de una buena preservación del patrimonio al aire libre.

 

José Luis Sanchidrián, quien fue conservador de las Cuevas de Nerja, también recela del vallado como solución más eficaz: “¿Quién le pone puertas al campo?”, se pregunta. Sin embargo, algunos grupos políticos, como es el caso del Partido Andalucista, han abogado por el vallado de estas pinturas y piden, incluso, la instalación de cámaras de seguridad en sus entornos. Cultura defiende su labor preventiva en los conjuntos cuya gestión tiene encomendada y cita como ejemplo los vallados en la Villa Romana de Bruñel (Quesada), en el yacimiento arqueológico de Puente Tablas (Jaén) o en el altozano Deán Pérez de Vargas (Andújar).

 

Con todo, tras los daños en las pinturas de Despeñaperros, todas las miradas se han dirigido hacia la Junta de Andalucía, como Administración tutelante de los bienes de carácter histórico. Sin embargo, la Consejería de Educación, Cultura y Deporte defiende su labor en materia de protección y conservación preventiva del patrimonio arqueológico conforme a lo previsto en la Ley 14/ 2007, de Patrimonio Histórico de Andalucía. El último año, la Junta abrió 170 expedientes sancionadores en la región por infracciones al patrimonio que está en lugares abiertos.

 

A pesar de no existir protocolos específicos de colaboración, la Junta valora la asistencia en esta materia de los cuerpos y fuerzas de seguridad, tanto Guardia Civil como policía autonómica e, incluso, la de los agentes de Medio Ambiente. El Servicio de Protección a la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil realiza cada año más de 500 actuaciones por expolios arqueológicos en el país, con Andalucía a la cabeza.

 

Desde el Seprona se advierte de que uno de los principales obstáculos para frenar los delitos contra el patrimonio es que no crean alarma social. “La sociedad avisa cuando hay vertidos a ríos o maltrato a animales pero raramente llaman para contar que se está produciendo un delito contra el patrimonio, no ha conciencia sobre ello”, indicó un portavoz del Seprona.

 

Con todo, los expertos alertan de la desprotección de estos bienes. “La solución pasa por reforzar la vigilancia, en especial cuando los bienes están dentro de un espacio natural protegido”, subraya Benito Navarrete, historiador de Arte. En su opinión, ya en 1986 se alertaba del abandono de las pinturas rupestres de la provincia de Cádiz y, ahora, la situación sigue siendo muy parecida. Pone como ejemplo los abrigos de las Cuevas de los Muñecos, en Despeñaperros, pinturas de estilo levantino con más de 6.000 años de vida que “están sistemáticamente saqueadas”. En los últimos tiempos están aumentando también los expedientes contra personas que utilizan detectores de metales en los yacimientos arqueológicos sin contar con autorización alguna para esa práctica.

 

Desde Cultura se llama la atención de que el 24% de los expedientes tramitados en los dos últimos años en Andalucía para su inscripción en el Catálogo General del Patrimonio Histórico pertenece a bienes del patrimonio arqueológico. Con relación al arte rupestre inscrito en la lista de Patrimonio Mundial, la Junta de Andalucía está trabajando para la redacción del Plan de Gestión de los citados bienes, tal y como demanda la Unesco, conjuntamente con el resto de las comunidades autónomas implicadas en el expediente del Arte Rupestre del Arco Mediterráneo.

DESTROZOS ANDALUCIA

La fiscalía, contra la “desidia” administrativa

La Fiscalía General del Estado se hace eco en su memoria de 2013 del reducido número de procedimientos que se tramitan por la vía penal en materia de patrimonio histórico. “En ocasiones, el problema reside en la inactividad de la Administración que está obligada a proteger tales bienes y no lo hace”, se apunta en la memoria, que alude a las quejas presentadas en este sentido desde las fiscalías de Huelva y Sevilla. Estas atribuyen parte del problema a la limitada remisión de denuncias o expedientes administrativos por parte de la Delegación provincial de Cultura de la Junta de Andalucía.

 

Las excavaciones ilegales son otras de las principales amenazas de las zonas arqueológicas. “Pero se suscitan problemas a la hora de imputar habida cuenta de la desidia de la Administración al no hacerse generalmente un inventario en la carta arqueológica o ante la falta de señalización de los yacimientos”, se indica en la memoria de la fiscalía.

 

Por el contrario, las actuaciones para castigar las pintadas con grafitis sobre bienes de valor histórico sí que ha aumentado en los últimos tiempos. No obstante, el ministerio público cree que este incremento se debe a las campañas para la erradicación de esas pintadas puestas en marcha desde diversas fiscalías, entre ellas la de Granada.

 

La Fiscalía de Cádiz valora una condena por el uso de aerosol de pintura sobre diversos monumentos de la ciudad. Mientras que la de Huelva pide que este tipo de conductas se consideren delictivas. “No constituye una solución proporcionada, justa y eficaz incardinar el tema en la falta de deslucimiento de inmuebles del artículo 626 del Código Penal”, subraya la fiscalía onubense.

 

Las leyes penales tan solo establecen multas de 10 a 20 días a los que causen daños en el patrimonio cuyo importe no exceda de 400 euros. Las penas pueden ir de uno a tres años de prisión cuando los daños se producen en bienes de valor histórico artístico o en yacimientos arqueológicos.

 

El fiscal superior del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), Jesús García Calderón, ya se mostró partidario de endurecer las penas por delito de patrimonio. “Es la única manera de asegurar una protección suficiente del llamado patrimonio oculto, tan frecuente entre los bienes arqueológicos, incluida la arqueología subacuática, o de omitir actuaciones poco diligentes de las distintas administraciones culturales”, indicó García Calderón, quien abogó también por incluir como nuevas tipologías penales las excavaciones ilegales.

 

El País

 

El patrimonio aragonés ocupa el tercer puesto en la Lista Roja de Hispania Nostra.

No están todos los que son, pero si son todos los que en ella están. De manera periódica, la Lista Roja Hispania Nostra aspira a recoger aquellos elementos del Patrimonio Histórico español que se encuentren sometidos por el riesgo de desaparición, destrucción o alteración esencial de sus valores. En ella, la comunidad aragonesa se sitúa en tercera posición con un total de 61 espacios de índole civil, militar, natural, religiosa o arqueológica en peligro. Castilla y León con 162 puntos en riesgo encabeza el ranquin, seguida por Andalucía.

 

Iglesias, castillos, conventos, masías? Más de 60 espacios aragoneses acuciados por la desidia y el abandono se cuentan en esta lista que,desde 2007, es la única que se encarga de exponer ante la opinión pública el mal estado en el que se encuentran los restos patrimoniales de todo el país. Eso sí, con la ayuda y colaboración de otras asociaciones locales.

 

Por provincias, Zaragoza encabeza la lista Por provincias, con 31 monumentos, Zaragoza es la primera en desfilar por la Lista Roja, seguida por Palencia y Huesca, donde se registran 23. Dentro de la comunidad aragonesa, Teruel es la mejor parada ya que solo suma cuatro.

 

La Cartuja de Nuestra Señora de las Fuentes o de los Monegros, en Sariñena, es uno de los espacios recogidos en la lista. Se trata de un antiguo monasterio de la orden cartuja, construido en el siglo XVIII en estilo barroco y en estado de abandono.
«La Dirección General de Patrimonio Cultural resolvió en mayo de 2010 una Orden de Ejecución a los propietarios, para que ejecutaran las obras correspondientes a la delimitación y señalización de la zona en riesgo del monasterio, sin que hasta la fecha se tenga constancia de que hayan procedido a su ejecución», describe la Asociación de Amigos de La Cartuja de Nuestra Señora de las Fuentes en la web de Hispania Nostra.

 

El conjunto industrial formado por los talleres y demás edificios de la empresa Averly S.A., en el centro urban de Zaragoza, ha sido el último en incorporarse. Hay una propuesta para que todo el conjunto, tanto industrial -incluidos los almacenes y hornos-, como residencial, el material mueble y documental sea declarado B.I.C,  pero la solicitud todavía está en curso.

 

«Predomina más el valor del suelo que el valor patrimonial»

«En Aragón no existe la cultura del mantenimiento, tampoco hay educación ni planificación institucional al respecto», explica Belén Boloqui, vicepresidenta de APUDEPA, uno de los colectivos colaboradores con la Lista Roja de Hispana Nostra.
«El ámbito eclesiástico goza de una salud mejor, porque se ha trabajado más, pero la arquitectura civil está totalmente abandonada», añade.

 

Para el colectivo de Acción Pública para la Defensa del Patrimonio Aragonés estas son algunas de las causas fundamentales de la situación aragonesa. «Además, los Ayuntamientos deberían de hacer valer las leyes urbanísticas y conservar los edificios, pero lamentablemente, no se hace», critica Boloqui.

 

«Predomina más el valor del suelo que el patrimonial y mientras esa visión no cambie, vamos por mal camino», añade.

 

La lista no es un ranquin oficial puesto que se elabora a partir de la colaboración de entidades locales comprometidas con la defensa del patrimonio, pero sí mide el pulso de la situación patrimonial con el objetivo de concienciar a la población y a las instituciones. En concreto, desde Aragón una treintena de colectivos colaboran con la lista, lo que, según apuntan desde Hispana Nostra, repercute también en el número de espacios catalogados y expuestos públicamente en la lista.

 

Heraldo

 

El Simposio de Historia alerta del abandono de monumentos y sobre su riesgo de expolio. Arousa

Preservar el patrimonio es el mensaje que caló en los participantes del simposio que ayer concluyó en Vilagarcía con un recorrido por la ria de Arousa en el que los asistentes tuvieron ocasión de conocer las torres de Catoira y A Lanzada y dos símbolos de la arquitectura religiosa románica, San Martiño de Sobrán y San Pedro de Sobradelo.

 

Se cerró así un intenso curso en el que los asistentes han puesto de manifiesto su preocupación por la conservación de un legado que sigue sometido a peligros importantes como el expolio y los actos vandálicos, tal como reconocen dos de los directores del curso, Augusto Guedes y Xesús Borraxeiros, quienes han coincidido en la necesidad de proteger toda esta riqueza histórica que todavía se conserva en Galicia y particularmente en O Salnés.

SIMPOSIO HISTORIA 1

Guedes incide en el hecho de poner en valor todo este conjunto de bienes, compuesto no solo por la huella material -iglesias, castillos y pazos- sino además el patrimonio inmaterial, mucho más difícil de preservar a través de las generaciones.

 

Pero lo más visible también tiene riesgos y Augusto Guedes expresa un temor especial por el abandono que sufren algunas joyas del patrimonio, tanto civil como religioso.

«En las jornadas nos hemos centrado en la Arousa medieval y uno de los capítulos que generó un mayor debate fue el de la protección de muchos monumentos que quedan vacíos, sin nadie que los vigile, pues es cuando se produce un verdadero expolio del patrimonio», lamenta el profesor e historiador vilagarciano.

 

«Han desaparecido piezas, incluso restos de la Edad de Hierro, y también contemporáneos, porque existe también un mercado negro para este tipo de piezas muy cotizadas», expone el profesor quien también hace referencias al vandalismo en monumentos como el que hace casi un año se registró sobre los muros del convento de Vista Alegre y que todavía permanecen sobre las históricas piedras.

 

Su compañero de simposio, el estradense Xesús Borraxeiros se queda con la idea de una mayor participación de los ciudadanos en la protección de todo el patrimonio histórico.

 

Apuesta por fórmulas de asociacionismo para proteger determinados conjuntos históricos, como es el caso de la comunidad de András respecto a la recuperación futura de la fortaleza de Monte Lobeira. El caso es similar al del patrocino que algunas empresas y colectivos realizan sobre diversas partes de la catedral de Viena, como las columnas.

 

Con todo, Borraxeiros percibe un cambio de actitud de la sociedad, aunque haya mucho camino por andar. «Los ciudadanos empiezan a ser conscientes del alto valor que tiene su patrimonio y, además, existen organizaciones como la iglesia o los propios feligreses que también están preocupados por mantener estos bienes colectivos, sin olvidar la vigilancia que desde hace algunos años se realiza por instituciones como la Dirección Xeral de Patrimonio.

 

Esta inversión de la tendencia, estima Borraxeiros, puede evitar que en el futuro desaparezcan símbolos de una tierra como ocurrió en O Salnés donde se perdió la práctica totalidad de las instalaciones salineras existentes en la alta Edad Media y que, precisamente, fueron las que dieron el nombre a la comarca.

SIMPOSIO HISTORIA 2

Con todo, se explicó en el curso, queda un legado histórico amplísimo que se debe proteger para venideras generaciones, argumentan Guedes y Borraxeiros, entre otros participantes.

 

Ambos coinciden en la grandeza de edificios como el monasterio de Armenteira o la propia iglesia de San Martiño de Sobrán, pero insisten en que todo el entorno natural es cultural: edificios, caminos, muros, límites de fincas…; sin olvidar el patrimonio etnográfico y otros muchos aspectos que permanecen en la memoria colectiva.

 

Dejar toda esta riqueza es, exponen, una obligación de cada ciudadano. «No se trata de proteger solo los monumentos más antiguos, que también, sino otros más cotidianos. Pasear por Rey Daviña o conservar, por ejemplo, el Salón García es un lujo que no se debe dejar perder», exponen los participantes.

 

Faro de Vigo

 

Guijuelo (Salamanca). El Torreón entra en la Lista Roja del Patrimonio

Los restos conocidos popularmente como el Torreón de Guijuelo han sido incorporados en la Lista Roja del Patrimonio que elabora la asociación Hispania Nostra, única agrupación que trata de proteger los elementos patrimoniales que han caído en el olvido y que necesitan un apoyo para que tanto ciudadanos como instituciones se fijen en ellos y busquen los medios necesarios para su recuperación y aprovechamiento.

TORREON-SALAMANCA

Esta asociación cuenta con la presidencia honorífica S.M. la Reina Sofía, sus vicepresidentes de honor son: Álvaro Fernández-Villaverde, Carlos Fitz-James Stuart y Santiago Ybarra y Churruca. Hispania Nostra actualmente está presidida por Araceli Pereda y su vicepresidente Carlos Morenés ha destacado que el Torreón de Guijuelo “necesita el apoyo de todos, para ser recuperado y su entrada en la Lista Roja de Patrimonio es de esperar que sirva para poner en alerta a aquellos que han que iniciar el trámite necesario para restaurar y recuperar este importante valor patrimonial”.

 

http://salamancartvaldia.es